Areneros, capazo y coladores, herramientas y tapones. Cosas de madera y de colores bonitos con las que los niños más pequeña entretiene, juega y experimenta. El proyecto Granitos de Arena pone estos objetos en la calle, en la plaza, para que la actividad de juego se haga en el espacio público y invite a añada a ellos quien pasa cerca. Está en fase de prueba piloto, desde enero.
Los servicios de pequeña infancia Hacemos Familia del Consorcio y el Materno Infantil de los Salesianos han puesto en marcha esta colaboración que, por un lado, reivindica el derecho de los niños a que su entorno sea un lugar seguro para jugar y, por otro, favorecer que se conozcan y relacionen las familias de ambos servicios y también porque de otras familias del barrio o que pasan conozcan este espacio de juego donde el desarrollo y la crianza son el eje central. Se entiende que el uso de la calle para el juego de los niños y sus familias es un factor que hace más seguro el entorno y el dignifica.
Prueba piloto con voluntad de continuidad
La actividad, que se puso en marcha el 24 de enero, se hace el segundo y cuarto viernes de cada mes en la plaza Maria Àngels Rosell, donde está el CAP La Mina, entre las diez de la mañana y las 12 del mediodía . Y, están previstos dos viernes más, este 13 de marzo y el 27 de marzo, que cierra la programación de esta prueba piloto. La idea, después, es evaluarlo para darle forma y continuidad. La experiencia es positiva y las familias que participan valoran la experiencia como muy positiva, especialmente, para poder compartir estos ratos con otras familias. También es una buena manera de mostrar el trabajo que estos dos servicios dedicados a la pequeña infancia hacen en el barrio de la Mina.
Granitos de Arena está pensado para niños de cero a tres años y el material que se ofrece está basado en la pedagogía Waldorf, Montessori y racons: cestas de los tesoros, juego heurístico y desestructurado. Hasta ahora han hecho uso de esta iniciativa veintidós dos familias. Del Hacemos Familia, servicio gestionado por el Casal por cuenta del Consorcio, concretamente, entre las tres sesiones realizadas han venido veintitrés tres personas, entre niños y adultos.