"La Mina reconoce al que se esfuerza, a lo que no se deja torcer y sigue luchando". Es una de las primeras frases que escuchamos de la canción "Hijos de la Mina", que han hecho el grupo de hombres y mujeres de Espai Jove y la PES La Mina. Es una canción que habla de amor en el barrio y en su gente a ritmo de rap con toques de rumba catalana.
El videoclip se encuentra ahora en la mesa de editaje y estará listo para el mes de marzo. Es el resultado de un trabajo colectivo y, sobre todo, participativo de cuatro meses con estos jóvenes para escribir la letra, musicar, grabar las voces y grabar las imágenes. La canción, que va repitiendo la vuelta, "Somos hijos de la Mina", es la reivindicación de un lugar donde todo el mundo se conoce y homenaje a la familia, el esfuerzo y la solidaridad. "Aquí todos somos amigos, hay unión", continúa, y describe el compañerismo y la interculturalidad "jugamos al fútbol gitanos y magrebíes". Pone una mirada amable y positiva sobre su barrio, tantas veces menospreciado y estigmatizado.
Gracias a la Plataforma por la Lengua, la ONG del catalán, se ha llevado a cabo el proyecto del videoclip, tras una experiencia similar en Ciutat Meridiana. La Plataforma pone los recursos y las herramientas necesarias para, mediante la realización del videoclip, trabajar la cohesión social y la promoción del uso del catalán, pensando en la igualdad de oportunidades en aquellos barrios donde está menos presente. Las grandes herramientas que la Plataforma ha puesto al alcance del proyecto son el rapero Nel·loC, músico, cantante, compositor y productor audiovisual; el cantante de rumba, Rafalito Salazar, gitano de Mataró, antiguo miembro de la banda de en Gato Pérez, y Estel Solé, dramaturga, actriz, escritora y productora cultural. Un equipo de lujo que se ha implicado plenamente en el proyecto. La Plataforma también ha facilitado el acceso a los estudios de grabación de la SGAE para registrar las voces.
"Aprendemos en la calle y en la escuela, algunas cosas muelen y otras no tanto", dice la canción. Reivindica la cultura de barrio, la proximidad de la comunidad y el uso del espacio público para el juego y la convivencia. "Por la tarde, la plaza, cajón, guitarra. Arte, ganas, amor a la mama. " Habla de superación, esperanza y futuro, "Entre bloques nos hemos hecho fuertes para llegar a buen puerto".
Proceso participativo con los jóvenes
En el desarrollo del proyecto ha participado una cuarentena de jóvenes. Se ha tratado de un proceso del todo participativo. Primer paso, una lluvia de ideas para elegir los temas que ellos querían que salieran a la canción, después, se escribieron las primeras frases y versos que, finalmente, se fueron encajando en la estructura narrativa. De la mano de Nel y en Rafalito, que en todas partes va con su guitarra, se ataron letra y música. A continuación, vinieron los ensayos y, paralelamente, con la guía del Estel Solé y, también de manera participada, la elección de localizaciones y espacios para mostrar la Mina como escenario del videoclip. Se ven sus calles y plazas, el Instituto escuela son alumnos los mismos jóvenes, y no podía faltar la Rambla Camarón. Tampoco las tiendas donde por la tarde van a buscar la merienda antes de ir al Espacio Joven o la PES para reunirse con sus amigos y educadores. Ahora, después de estos meses de trabajo en equipo, los jóvenes de una entidad y la otra se conocen mejor y son más colegas. Por su parte, los jóvenes del Casal también han participado en algunas de las sesiones y han haciendo un mural en relación al proyecto.
El próximo 19 de marzo, en el marco de la III Fiesta de la Primavera que se hará en el parque del Besòs, está previsto hacer una muestra de lo que será el videoclip final, con la actuación de los jóvenes que cantarán la canción "Hijos de la mina "acompañados de Nel y en Rafalito. La creación del videoclip ha sido una experiencia muy enriquecedora, así que seguimos trabajando con la Plataforma de la Lengua para aprovechar este empuje con nuevos proyectos.
