La Agencia Catalana de la Salud Pública con el Plan integral para la promoción de la salud mediante la actividad física y la alimentación saludable (PAAS) pone en marcha una prueba piloto en el barrio de la Mina para luchar contra el sobrepeso y la obesidad infantil. El programa también abarca los barrios de la Catalana, el Besòs barcelonés y el del Port Forum. En total una población de 50 mil personas.

 

Las estadísticas son alarmantes y los porcentajes en el barrio de la Mina son los más altos de toda Cataluña, 9 puntos superiores a la media del país. Si establecemos comparativas, tenemos que la obesidad infantil en el barrio de Sant Gervasi de Barcelona -a sólo 6 kilómetros de distancia dentro de la misma área metropolitana- el índice es del 2,6% y en la Mina del 24%. Estamos hablando de población infantil y pre-adolescente de entre 6 y 12 años. Si sumamos los casos de sobrepeso y obesidad son 43 de cada cien. Datos de 2017 correspondientes al Área Básica de Salud, año en que en la Mina había un total de 2.997 niños de entre 0 y 14 años (1.567 niños y 1.439 niñas). Otro dato preocupante, si se observa la evolución en los últimos cuatro años (enero 2016 a enero 2019), el cribado de la obesidad en la franja de 6 a 14 años aumenta hasta el 89,16%. Y, aunque otra, entre la población de 4 a 14 años atendida por el CAP La Mina, durante los últimos dos años, un 94,54% de presenta un índice de masa corporal (IMC) superior o igual al percentil 95, a partir del que se diagnostica la obesidad infantil.

Las consecuencias de la obesidad infantil son graves. Dificultad para respirar y, por tanto, ahogo, somnolencia, problemas ortopédicos, transpiración excesiva, e hinchazón de pies y tobillos. A los trastornos físicos que, además, son incapacitantes para la actividad física y de desarrollo, hay que sumar los problemas psicológicos y sociales. Tales como la discriminación y el aislamiento del grupo, las dificultades para relacionarse y jugar con los demás, la angustia y la baja autoestima que también crean introversión y bajo rendimiento escolar.

 

La Mina, Osona y Tarragona
La prueba piloto que se pone en marcha se incorpora al modelo actual de prevención y atención a la obesidad de niños y jóvenes para ir más allá en la solución a los casos de obesidad complicada, mórbida, genética o de mala evolución. Al mismo tiempo también se ponen en marcha programas piloto en Osona y en Tarragona. En todos los casos se trata de evaluar la viabilidad de su implementación y de identificar las necesidades de este proceso, teniendo en cuenta las peculiaridades de cada realidad. A la vez que impulsar la participación y el trabajo en red de los agentes e instituciones implicados en la prevención y atención de la obesidad infantil. En el caso de la Mina, a primeros de este mes de septiembre se hizo una primera reunión para constituir el grupo motor e identificar todas las partes que deberían participar, y el próximo mes de octubre se pasará a la fase de planificación para identificar recursos y actividades que se pueden aprovechar, poner en común datos disponibles, detectar vacíos de información y priorizar las nuevas intervenciones. Están previstas sesiones formativas para todos los equipos profesionales sanitarios, educativos, equipamientos y servicios del barrio, así como específicas para el personal de pediatría.

El programa cuenta con la implicación de la red de salud del territorio y, especialmente, del centro de salud del barrio desde sus equipos de pediatría, salud sexual y reproductiva, y de salud mental. Por otro lado, está el Ayuntamiento de Sant Adrià participando desde las concejalías de deportes y servicios sociales que incluye la atención a familias, niños y jóvenes. Y, se quiere que también sean el Consejo comarcal y Diputación entre otras administraciones locales, como el Consorcio del barrio de la Mina que ya ha participado de la primera reunión del grupo motor, al igual que la dirección del Instituto Escuela La Mina. En la jornada de lanzamiento que se realizará el próximo 22 de octubre se incorporarán las entidades y servicios del barrio que protagonizan su vida y actividad comunitaria.

El objetivo es que la implicación sea de todo el tejido del barrio para que la preocupación por el problema de la obesidad infantil llegue a todos y que los mensajes clave para prevenirla y remitirla sean lo más transversales y permeables posible. El modelo que se pone en marcha es una oportunidad para optimizar y homogeneizar la atención y la prevención del exceso de peso infantil. Que pide una adaptación de la atención pediátrica primaria y la implicación de los profesionales de la salud, la educación y el deporte, con el acompañamiento de toda la comunidad.

Consorcio del barrio de la Mina