Después del verano, la agrupación La Mina Camina retoma en septiembre las caminatas que se hacen cada cuarto domingo de mes y recupera el programa de actividades culturales que se puso en marcha el mes de enero del año pasado. Ni que decir, que tanto las caminatas como las visitas se han visto afectadas por la pandemia del Covidien con cancelaciones y reprogramaciones.
Ahora, sin embargo, sólo entre los meses de septiembre y octubre están previstas siete actividades culturales: tres obras de teatro - Teatro Goya, Sala Villarroel y Teatro Romea-, una representación de ópera en el Liceu, dos visitas guiadas -una en el parque Zoológico y la otra en el Castillo de Montjuïc- y una visita del grupo en el Parque Güell. Anteriormente, se ha visitado: la basílica de la Merced, la Biblioteca Nacional de Cataluña, el Museo del Chocolate, el Instituto de Estudios Catalanes, el Depósito de Aguas Pluviales de Barcelona, la Cárcel Modelo y el Museo Azul de Ciencias Naturales. El coste de las actividades culturales, que gozan de un precio social, es de 5 euros.
Estas marchas urbanas que a la vez tienen la intención de recorrer los parques y las zonas verdes del Área Metropolitana de Barcelona, son aptas para todos. Sus itinerarios están entre los tres kilómetros y los poco más de seis. El punto de encuentro es el CAP de la Mina, a las nueve de la mañana. La salida puede comenzar desde allí mismo o haber un primer desplazamiento en transporte público hasta el punto de inicio del itinerario elegido. Los últimos recorridos del grupo han pasado por Ciutat Vella, el Eixample, el Parque del Clot, el Puerto del Foro y la Rambla del Poblenou. La caminata del mes de septiembre, domingo 26, es el Castillo de Montjuïc (3,6 km.).
Equipación logotipado y presencia en las redes
La Mina Camina, con una cincuentena de participantes, que suele reunir unas veintidós cinco personas a las salidas, depende de una vocalía de la Asociación de vecinos y vecinas del barrio de la Mina. Actualmente, tiene una pequeña comisión de tres personas que llevan la organización y la gestión. En las caminatas y actividades que hacen los miembros de la agrupación lucen sus camisetas y sudaderas logotipado, que refuerzan la identidad del colectivo, para las que han contado con una colaboración del Ayuntamiento. Para hacer difusión de sus actividades tienen presencia en Facebook e Instagram, y para cada caminata elaboran un cartel con información detallada sobre la ruta y los puntos de interés por donde pasa.
La iniciativa fue del ya desaparecido médico del CAP La Mina, Albert Ramos, que vio en estas caminatas en grupo una fuente de bienestar físico y emocional para sus pacientes. Más actividad física, más interrelación social y menos medicación; este era el principio que se planteó. Y que al mismo tiempo podía hacer extensible al conjunto de la comunidad del barrio. Tras él asumió la organización el también desaparecido, y psicólogo del CAP La Mina, Pedro Lorente, de quien tomó el relevo Eduard Fuentes, vecino del barrio, al que más tarde se han sumado dos vecinos más, Eugenio Díaz y Paco Hernández.
Garantizar el relevo y la autogestión de la agrupación
A lo largo del año se hacen dos comidas de hermandad, el uno en el mes de diciembre coincidiendo con la asamblea anual donde se hacen propuestas de actividades y se llega a acuerdos de organización y funcionamiento, y otro el mes de julio. Los objetivos inmediatos de la agrupación son consolidarse dentro de la comunidad del barrio, la incorporación de gente joven que garantice el relevo y constituir una comisión más amplia para la gestión del proyecto.