Durante el primer semestre de 2018, 807 personas han participado en un itinerario sociolaboral para aumentar las posibilidades de encontrar trabajo o mejorar el actual, incrementando en 16 personas respecto al 2017, de las cuales el 20% son personas que han iniciado su proceso sociolaboral 2018.
Si desgranamos las cifras, encuentran que 485 son hombres, representando el 60%, mientras el 40% son mujeres, con un número de 322 mujeres.
Además de las personas vinculadas a un itinerario sociolaboral, han informado a 574 personas en relación a demandas de gestión administrativas diversas, como obtener el certificado de vida laboral o pedir cita previa a organismos públicos, además de dar información de los recursos existentes el territorio o aclarar dudas relacionadas con el mundo laboral.
Aumento de las inserciones formativas
Otro punto a destacar es el aumento de las inserciones formativas. Mientras que el 2017 iniciaron un proceso formativo 86 personas, este año, han sido 125, representando el 15% del total de personas vinculadas a la red, resultado muy positivo para la mejora de la empleabilidad de las personas atendidas y el aumento de posibilidades de acceso al mundo laboral actual.
En relación a la inserción laboral, durante el primer semestre de 2018, se han insertado 230 personas, generando un total de 287 contratos de trabajo, y representando 29% de inserción laboral, porcentaje que supera los objetivos marcados por todo el año. De estas personas insertadas, 141 han sido hombres, y 89 mujeres; hecho relacionado con el numero mayoritario de hombres vinculados a los servicios de la red.
Respecto al mantenimiento en el mercado laboral de las personas que se insertaron en el 2017, de las 360 personas, 217 continúan trabajando a fecha de 30 de junio de 2018, representando el 60,28% de las personas que se insertaron durante el 2017, porcentaje muy positivo teniendo en cuenta la falta de estabilidad laboral para el gran numero de contrataciones temporales-
En general, podemos afirmar que se mantienen los resultados positivos de 2017, destacando el aumento de las personas que han realizado formaciones como herramienta para mejorar su situación sociolaboral.